Ahora hablaremos un tema polémico en la sociedad ya que existen muchos y poderosos medios e instituciones, de distintas corrientes religiosas y políticas que bombardean con publicidad sobre el supuesto “acto de amor que es la donación de órganos”. Este bombardeo va directamente sobre las conciencias de las personas. Este es nuestro punto de vista, sabemos que a muchos le molesta pero es la Verdad pura, dejada por los Maestros de la Cosmogonía a través de nuestra Madrecita Laura Antonia y nosotros no podemos decir otra cosa sino la Verdad de las cosas.Para comprender por que el hombre terreno no debe donar sus órganos, para salvar la vida de un semejante enfermo desahuciado por la medicina terrestre, es necesario que todos sepan lo siguiente:
1ero. Que el hombre esta formado por una trinidad:
a) El Espíritu Inmortal, que es la verdadera vida. El espíritu es el hombre y es una chispa electromagnética donde reside la inteligencia, la razón, el discernimiento y también la experiencia y conocimientos acumulados en todas sus reencarnaciones. Tiene su asiento en la glándula pineal, que tiene el tamaño de un poroto y esta ubicada en el centro del cerebro. Esta glándula secreta hormonas benéficas para el cuerpo humano.
b) El Peri-Espíritu o alma, que es un duplicado etérico del cuerpo físico y compenetra totalmente al cuerpo físico y sirve de conexión entre el espíritu y el cuerpo. El peri-espíritu tiene si asiento en la sangre, que como sabemos, llega hasta la última célula de nuestro cuerpo.
c) El Cuerpo Físico, que es una máquina automática perfecta que sirve para que el espíritu, que es el hombre y la vida, pueda cumplir sus obras en el planeta Tierra.
2do. Existe la Reencarnación, como una de las 4 leyes Divinas de la Vida, que rigen inflexiblemente a los hombres; 1ero Nacer, 2do Vivir la vida en la Tierra, 3ero Desencarnar (lo que los hombres llaman “morir”), 4to Reencarnar.
La Reencarnación determina que después de desencarnar (la muerte física) el espíritu inmortal sigue viviendo, con toda su inteligencia y comprensión de todas las cosas, y pasa al mundo espiritual, después de permanecer tres días en la Tierra, asistiendo a su funeral, visitando su hogar, eventualmente haciéndose visible a sus deudos, deambulando por sus sitios de trabajo, etc, mas adelante el espíritu será llevado a otro planeta, donde todos los espíritus son sometidos a su auto juicio. Allí verá como una gran pantalla de televisión y como en una película observará todas sus reencarnaciones pasadas”. Entonces, cada espíritu humano, guiado por la Justicia Divina, después de este auto juicio, determinará que karmas pagará en la próxima reencarnación. Escogerá padres apropiados para poder pagar sus karmas, medio socioeconómico, país, latitud de la Tierra, tiempo y lugar, etc. Para reencarnar. Y en esa nueva vida habrán de llegar junto a él todos los individuos, hombres y mujeres, relacionados con los karmas que ese espíritu debe pagar, o debe ver pagar a otros, que antes le causaron a él, daños o muertes.
De modo que la reencarnación es expresión de la Justicia Perfecta del Divino Padre Creador, que no perdona pecados, sino que da a cada cual lo que se merece, al justo lo protege y premia, al malo lo castiga en forma implacable.
No se piense que el Padre es cruel, No. Él es todo amor, es todo bondad, todo justicia. La crueldad y la impiedad es de los hombres de la Tierra que no respetan sus Leyes Divinas, que tienden al bienestar y al progreso espiritual del hombre.
Ya vemos como hoy la mayoría de la humanidad terrena hace caso omiso de estas leyes, y por eso está siendo castigada y sé autodestruirá con las terribles armas atómicas de su diabólica invención.
La misericordia Infinita del Divino Padre Creador, se manifiesta en el hecho que da a sus hijos, miles de oportunidades para pagar sus faltas (sus karmas) mediante la Reencarnación.
Entre 9 planos Astrales de progreso espiritual, que existen en el Universo, siendo el 9no plano él más avanzado, nuestro planeta Tierra es sólo un mundo de tercera categoría, de un 3er plano de progreso. Es un planeta primitivo, con la mayoría de su humanidad todavía con escaso progreso espiritual. Solamente hay que observar el caos de violencia e impiedad que ha generado la humanidad Terrena actual, para comprobar su bajo nivel de progreso, en general.
La Tierra es pues, un Planeta de Expiación, donde todos los espíritus que reencarnan aquí, vienen a pagar sus karmas, es decir, la carga negativa que tienen sus espíritus, por las faltas o pecados cometidos contra sus semejantes en vidas pasadas o a veces, en la vida actual.
El daño causado a nuestros semejantes en otras vidas, lo pagaremos en la reencarnación actual con sufrimientos morales o físicos: Enfermedades, accidentes, etc. Porque la Ley Divina enunciada por nuestro Divino Maestro Jesús, el Mesías, dice: “Con la vara que mides, serás medido”,”el que a hierro mata, a hierro morirá” y “el que hace a otro esclavo, en esclavitud parará”.
3ero El Divino Padre Creador es el Único Dueño y Señor de nuestros destinos
Cada espíritu al reencarnar, además de sus karmas asignados a pagar, trae su destino trazado, y en él figura el momento y circunstancias precisas en que deberá “desencarnar” (morir), con año, mes, día, hora y segundo preciso y cronométrico, para el momento fatal. Pero el Padre Divino, es el Único que podrá determinar que ese momento y segundo fatal sea superado. Por lo que, a los padres de un niño desahuciado por los médicos, solo les restará el recurso de orar y pedir al Padre Divino, por la mejoría de ese enfermito. Y en esta oración ofrecer una compensación o penitencia personal, como la de cambiar de vida en el sentido del bien, por ejemplo, a cambio de la vida del pequeño.
La Voluntad y la Justicia del Divino Padre decidirá en último término, si esta petición es atendible o no.
Los médicos terrenos solo están facultados para tratar de sanar con los recursos de la medicina actual de la Tierra, a aliviar lo más posible los síntomas que indispensablemente causarán el fallecimiento del paciente. Pero los médicos no son Dios. Son solo hombres de la Tierra, con una hermosa misión humanitaria. Pero ellos no deben ni acortar la vida de un paciente (Eutanasia), ni alargar el plazo fatal (prolongar la vida física con máquinas, etc.)
Respecto a la donación de órganos esta prohibido por la Ley Divina, porque esta señala que el destino del cadáver es ir a la tierra, para descomponerse e integrarse a la naturaleza. Por otra parte, no somos dueños ni de nuestro propio cuerpo, ni del de nuestros semejantes, porque el Padre ha facilitado en préstamo ese cuerpo a cada espíritu individualmente, para cumplir su misión particular en la vida terrena.
Estando en vida física, debemos cuidar nuestro cuerpo, y al momento de desencarnar debemos entregarlo al Padre, como marque la Ley de Justicia, sin atentar contra el nosotros mismo, donando un órgano del cuerpo que nos ha sido prestado por el Divino Padre
Es también importante recordar que la ciencia terrena ya ha descubierto que el agua tiene memoria electromagnética, por lo que estando nuestro cuerpo formado por casi 90% de agua, cada órgano llevará la memoria del hombre al cual sirvió. Y en ese órgano transmitirá al que reciba el transplante, todas las características de la personalidad del dueño anterior: Costumbres, tendencias, aficiones, vicios (drogas, el juego, alcohol, etc.), e incluso tendencias suicidas o criminales. ¿Que padre querrá transmitir a su hijo amado, posibles lacras que correspondería a otro sufrir, y que cambiara la personalidad de ese hijo, llevándolo a su autodestrucción, o lo que es más grave, harán que ese espíritu de ese hijo pierda su progreso espiritual, llevando este a fojas cero?
El Divino Maestro Jesús nos ha enseñado, a través de Madrecita Laura Antonia,” De Dios la Voluntad”, es todo lo que sucede, por lo que no debemos rebelarnos jamás contra la justicia Divina.
Pongamos un ejemplo: Una reina en la antigüedad, que se suicida haciéndose morder en un pie por una serpiente venenosa, deberá pagar en el futuro, quizás en una reencarnación del siglo XX, estando en una playa en luna de miel con su esposo, disfrutando de salud y dicha, que sea picada en su pie por un insecto venenoso, y morirá de septicemia fulminante. El esposo se preguntara “¿Por qué?, con desesperación. Pero he ahí la aplicación de la Justicia Divina, porque el suicidio no esta permitido.
Puntualicemos ahora algunas importantes revelaciones que hemos recibido a través de la Profeta del Padre en la Tierra y que todas las personas deberán conocer:
1- La donación de órganos es mala.
El hombre no es dueño de su cuerpo. el Padre Divino es el dueño, y se le facilita en préstamo para que haga sus obras en la tierra.
Si un hombre dona su órgano, en la próxima reencarnación llegara con ese órgano enfermo; o si es un miembro, le faltara ese miembro. Si la familia dona un órgano del cadáver de un familiar, ese o esos familiares que tomaron esa decisión, serán responsables y recibirán su castigo.
2- Prolongar la vida artificialmente es malo.
Cada hombre tiene su momento fatal escrito en su destino y asi debe ser.
3- La manipulación genética es mala
El científico que elimina enfermedades en los genes, el mismo la tendrá en la próxima reencarnación: Como se sabe, los “genes” están dentro de los cromosomas que se forman al dividirse la célula y provienen del material dentro del núcleo.
En los “genes” están inscritas como en un CD, todas las características hereditarias que serán transmitidas por los padres a sus descendientes, como por ejemplo: Color de pelo, de la piel, los ojos. Características físicas y las enfermedades hereditarias o la predisposición a ellas. Todo de acuerdo a la Justicia Divina del Padre Creador.
De modo que remover un “gen” que señala una enfermedad hereditaria, es oponerse a la Justicia del Padre Creador. Por eso el “falso científico” que hace eso,”adquiere” por Justicia, esa enfermedad para sí mismo para la próxima reencarnación.
4- Servir como “conejillo de Indias” para experimentos, es malo.
5- Vender su sangre es malo
6- Donar su sangre como sistema de ayuda permanente, es malo.
Sin embargo, está permitido donar su sangre para salvar la vida de un familiar consanguíneo.De modo que la reencarnación es expresión de la Justicia Perfecta del Divino Padre Creador, que no perdona pecados, sino que da a cada cual lo que se merece, al justo lo protege y premia, al malo lo castiga en forma implacable.
No se piense que el Padre es cruel, No. Él es todo amor, es todo bondad, todo justicia. La crueldad y la impiedad es de los hombres de la Tierra que no respetan sus Leyes Divinas, que tienden al bienestar y al progreso espiritual del hombre.
Ya vemos como hoy la mayoría de la humanidad terrena hace caso omiso de estas leyes, y por eso está siendo castigada y sé autodestruirá con las terribles armas atómicas de su diabólica invención.
La misericordia Infinita del Divino Padre Creador, se manifiesta en el hecho que da a sus hijos, miles de oportunidades para pagar sus faltas (sus karmas) mediante la Reencarnación.Entre 9 planos Astrales de progreso espiritual, que existen en el Universo, siendo el 9no plano él más avanzado, nuestro planeta Tierra es sólo un mundo de tercera categoría, de un 3er plano de progreso. Es un planeta primitivo, con la mayoría de su humanidad todavía con escaso progreso espiritual. Solamente hay que observar el caos de violencia e impiedad que ha generado la humanidad Terrena actual, para comprobar su bajo nivel de progreso, en general.
La Tierra es pues, un Planeta de Expiación, donde todos los espíritus que reencarnan aquí, vienen a pagar sus karmas, es decir, la carga negativa que tienen sus espíritus, por las faltas o pecados cometidos contra sus semejantes en vidas pasadas o a veces, en la vida actual.
El daño causado a nuestros semejantes en otras vidas, lo pagaremos en la reencarnación actual con sufrimientos morales o físicos: Enfermedades, accidentes, etc. Porque la Ley Divina enunciada por nuestro Divino Maestro Jesús, el Mesías, dice: “Con la vara que mides, serás medido”,”el que a hierro mata, a hierro morirá” y “el que hace a otro esclavo, en esclavitud parará”.
3ero El Divino Padre Creador es el Único Dueño y Señor de nuestros destinos
Cada espíritu al reencarnar, además de sus karmas asignados a pagar, trae su destino trazado, y en él figura el momento y circunstancias precisas en que deberá “desencarnar” (morir), con año, mes, día, hora y segundo preciso y cronométrico, para el momento fatal. Pero el Padre Divino, es el Único que podrá determinar que ese momento y segundo fatal sea superado. Por lo que, a los padres de un niño desahuciado por los médicos, solo les restará el recurso de orar y pedir al Padre Divino, por la mejoría de ese enfermito. Y en esta oración ofrecer una compensación o penitencia personal, como la de cambiar de vida en el sentido del bien, por ejemplo, a cambio de la vida del pequeño.
La Voluntad y la Justicia del Divino Padre decidirá en último término, si esta petición es atendible o no.Los médicos terrenos solo están facultados para tratar de sanar con los recursos de la medicina actual de la Tierra, a aliviar lo más posible los síntomas que indispensablemente causarán el fallecimiento del paciente. Pero los médicos no son Dios. Son solo hombres de la Tierra, con una hermosa misión humanitaria. Pero ellos no deben ni acortar la vida de un paciente (Eutanasia), ni alargar el plazo fatal (prolongar la vida física con máquinas, etc.)
Respecto a la donación de órganos esta prohibido por la Ley Divina, porque esta señala que el destino del cadáver es ir a la tierra, para descomponerse e integrarse a la naturaleza. Por otra parte, no somos dueños ni de nuestro propio cuerpo, ni del de nuestros semejantes, porque el Padre ha facilitado en préstamo ese cuerpo a cada espíritu individualmente, para cumplir su misión particular en la vida terrena.
Estando en vida física, debemos cuidar nuestro cuerpo, y al momento de desencarnar debemos entregarlo al Padre, como marque la Ley de Justicia, sin atentar contra el nosotros mismo, donando un órgano del cuerpo que nos ha sido prestado por el Divino Padre
Es también importante recordar que la ciencia terrena ya ha descubierto que el agua tiene memoria electromagnética, por lo que estando nuestro cuerpo formado por casi 90% de agua, cada órgano llevará la memoria del hombre al cual sirvió. Y en ese órgano transmitirá al que reciba el transplante, todas las características de la personalidad del dueño anterior: Costumbres, tendencias, aficiones, vicios (drogas, el juego, alcohol, etc.), e incluso tendencias suicidas o criminales. ¿Que padre querrá transmitir a su hijo amado, posibles lacras que correspondería a otro sufrir, y que cambiara la personalidad de ese hijo, llevándolo a su autodestrucción, o lo que es más grave, harán que ese espíritu de ese hijo pierda su progreso espiritual, llevando este a fojas cero?
El Divino Maestro Jesús nos ha enseñado, a través de Madrecita Laura Antonia,” De Dios la Voluntad”, es todo lo que sucede, por lo que no debemos rebelarnos jamás contra la justicia Divina.
Pongamos un ejemplo: Una reina en la antigüedad, que se suicida haciéndose morder en un pie por una serpiente venenosa, deberá pagar en el futuro, quizás en una reencarnación del siglo XX, estando en una playa en luna de miel con su esposo, disfrutando de salud y dicha, que sea picada en su pie por un insecto venenoso, y morirá de septicemia fulminante. El esposo se preguntara “¿Por qué?, con desesperación. Pero he ahí la aplicación de la Justicia Divina, porque el suicidio no esta permitido.
Puntualicemos ahora algunas importantes revelaciones que hemos recibido a través de la Profeta del Padre en la Tierra y que todas las personas deberán conocer:
1- La donación de órganos es mala.
El hombre no es dueño de su cuerpo. el Padre Divino es el dueño, y se le facilita en préstamo para que haga sus obras en la tierra.
Si un hombre dona su órgano, en la próxima reencarnación llegara con ese órgano enfermo; o si es un miembro, le faltara ese miembro. Si la familia dona un órgano del cadáver de un familiar, ese o esos familiares que tomaron esa decisión, serán responsables y recibirán su castigo.
2- Prolongar la vida artificialmente es malo.
Cada hombre tiene su momento fatal escrito en su destino y asi debe ser.
3- La manipulación genética es mala
El científico que elimina enfermedades en los genes, el mismo la tendrá en la próxima reencarnación: Como se sabe, los “genes” están dentro de los cromosomas que se forman al dividirse la célula y provienen del material dentro del núcleo.
En los “genes” están inscritas como en un CD, todas las características hereditarias que serán transmitidas por los padres a sus descendientes, como por ejemplo: Color de pelo, de la piel, los ojos. Características físicas y las enfermedades hereditarias o la predisposición a ellas. Todo de acuerdo a la Justicia Divina del Padre Creador.
De modo que remover un “gen” que señala una enfermedad hereditaria, es oponerse a la Justicia del Padre Creador. Por eso el “falso científico” que hace eso,”adquiere” por Justicia, esa enfermedad para sí mismo para la próxima reencarnación.
4- Servir como “conejillo de Indias” para experimentos, es malo.
5- Vender su sangre es malo
6- Donar su sangre como sistema de ayuda permanente, es malo.
7- La Eutanasia es mala.
Rechazada. Cada ser humano trae su destino trazado y con su momento de desencarnar determinado exactamente, haciendo sí la salvedad de que el Divino Padre es el único dueño y Señor de todos los destinos de los hombres.
La medicina puede ayudar a mitigar los sufrimientos, pero no debe quitar la vida a un enfermo desahuciado sufriente. Eso seria oponerse a la Justicia Divina.
Ejemplo: el caso de un hombre, que en la edad madura enfermó del estómago y no pudo ingerir más alimentos. Fue quedando paulatinamente transformado en esqueleto viviente.
Pedía e imploraba la Eutanasia, para terminar su sufrimiento. Esta no le fue suministrada y finalmente falleció de hambre.
Sin embargo, la Justicia Perfecta del Padre Creador y Supremo Juez lo castigó así, porque este hombre había sido en el pasado, un carcelero de la Inquisición, cruel e implacable fanático, que hizo morir de hambre a numerosos prisioneros de ese siniestro tribunal.
8- La clonación es mala.
En la clonación, es un solo espíritu que alienta en los dos cuerpos; por eso, en el caso de la oveja clonada, los dos animalitos tendían a estar siempre juntos y estaban siempre asustados, por que sentían que les faltaba una parte de su espíritu, que era su vida.
Ese experimento ha sido una monstruosidad hecha por los mal llamados “científicos”, que no conocen al Divino Padre Creador, ni respetan sus Leyes Sabias que rigen a la Naturaleza en todo el Universo, con Justicia y Sabiduría Perfectas.
